Los adaptadores de viaje son prácticos ayudantes para uso temporal en el extranjero. Se han desarrollado especialmente para un uso a corto plazo en viajes, por ejemplo en hoteles, ferias o vacaciones. No son adecuados para un uso permanente en el hogar o como solución de toma de corriente fija, ya que normalmente no pueden soportar una tensión mecánica permanente ni un consumo de corriente elevado y continuo durante un largo periodo de tiempo. Su uso prolongado puede suponer un riesgo de incendio.