Las bases de enchufe múltiples se rigen por la norma de seguridad alemana DIN VDE 0620-2-1, que debe cumplirse.
En esta norma, la estructura (diseño) se diferencia en
clavijas y tomas de corriente reconectables (clavija y toma de acoplamiento), que deben estar equipadas con terminales de tornillo, y
no reconectables, que deben estar equipados con conexiones permanentemente efectivas (por ejemplo, conexiones soldadas o engarzadas) (no se permiten terminales de tornillo).
El tipo «no reconectable» va acompañado del requisito normalizado de que no debe ser posible desconectar el cable flexible sin inutilizar permanentemente el conector. Además, no debe ser posible abrir ni los enchufes ni las tomas de acoplamiento con la mano o con una herramienta manual. Los tornillos unidireccionales son expresamente adecuados para este fin.
El trasfondo de este requisito normativo es que no debe ser posible que los usuarios finales realicen cambios en conexiones permanentemente efectivas (por ejemplo, conexiones soldadas, soldadas o engarzadas) porque no se puede asumir que todo el mundo pueda hacerlo técnicamente de forma correcta. Con ello se pretende evitar un posible riesgo para la seguridad.
La elección del tipo de conector por parte del fabricante puede deberse al espacio de instalación o a que un tipo ofrece ventajas durante la prueba de calentamiento.