Cuando se trabaja en obras con equipos eléctricos, se recomienda expresamente, según BGI 608, utilizar dispositivos de protección RCD.
Tiene sentido utilizar el RCD prácticamente siempre. Especialmente cuando los cables están sometidos a grandes esfuerzos, por ejemplo, en obras, en el jardín, en acampadas, en la agricultura, en zonas con riesgo de incendio y en entornos húmedos y sucios.