Las fuentes de alimentación conmutadas a menudo zumban debido a un fenómeno relacionado con los componentes magnéticos y las altas frecuencias de conmutación utilizadas en estas fuentes de alimentación. Estas son las principales razones por las que las fuentes de alimentación conmutadas pueden zumbar:
1. Magnetostricción:
La magnetostricción es un efecto en el que los materiales magnéticos (por ejemplo, los núcleos de hierro en transformadores o bobinas) se expanden y contraen ligeramente cuando se aplica un campo magnético. En las fuentes de alimentación conmutadas se generan campos magnéticos de alta frecuencia que pueden provocar esta deformación mecánica. Cuando el material vibra a la frecuencia de la fuente de alimentación conmutada, genera ondas sonoras en el rango audible, que se perciben como un zumbido.
2. frecuencias de conmutación:
Las fuentes de alimentación conmutadas funcionan normalmente a frecuencias de conmutación muy altas, normalmente en el rango de 20 kHz hasta varios 100 kHz. Estas frecuencias suelen estar por encima del rango de audición humana (20 Hz a 20 kHz).
3. efectos dependientes de la carga:
En muchos casos, la frecuencia de conmutación de la fuente de alimentación cambia en función de la carga aplicada. En determinadas condiciones de carga, la fuente de alimentación puede funcionar en un rango de frecuencias audible o generar oscilaciones que provoquen un zumbido. Especialmente con cargas bajas, las fuentes de alimentación conmutadas pueden emitir a veces una especie de «chirrido» o «silbido».
En resumen, las fuentes de alimentación conmutadas zumban debido a las vibraciones de los componentes magnéticos (como bobinas y transformadores) y a las vibraciones mecánicas provocadas por las altas frecuencias de conmutación.
Este efecto se percibe de forma diferente de una persona a otra y no es un defecto del producto.