La garantía legal (responsabilidad por defectos) es válida durante 24 meses a partir de la fecha de compra y es una obligación del minorista (vendedor). El vendedor debe garantizar que los bienes vendidos están libres de defectos. En caso contrario, el cliente tiene derecho a la reparación o sustitución gratuitas. Para ello, debe enviar la mercancía defectuosa. Si no es posible ni la reparación ni la sustitución, el cliente puede exigir el reembolso o una reducción del precio de compra. Si el defecto se produce dentro de los 12 primeros meses, se supone que el defecto ya existía cuando se entregó la mercancía al cliente. Transcurridos 12 meses, el cliente debe demostrarlo (inversión de la carga de la prueba).